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Otra vez, la historia se repite, preoperatorio, gente con batas, una enorme camilla.. y miedo, sobre todo mucho miedo...

- ¿como te llamas?

+ Natalia

- ¿estas nerviosa Natalia?

+ si, un poco

Y sin avisar sientes un dolor intenso en la muñeca izquierda, y un fluido frio recorriendo las venas de tu brazo, las lagrimas corren, tiembras, pero poco a poco te relajas, ya no hay marcha atras..

-¿como te encuentras Natalia? ¿sigues nerviosas?

+ no, ya no tanto

mientes, el miedo sigue ahi, los nervios y tensiones, pero la morfina es demasiado fuerte como para sentirlas, para sentir el dolor que esta aguja te produce, como para pensar en lo que te espera. Te sientes cansado... y poco a poco te van pesando mas y mas lo parpados... caes rendida.

Pasa en rato: segundos, minutos, horas.. ¿puede que dias? pierdes la nocion del tiempo, pero algo esta muy claro, hace frio, pero no del tipico de las mañanas de enero, este es un frio duro y aplastante que te cala hasta los huesos, oyes mur muros al otro lado de la sabana verde - se esta despertando, duplica la dosis- una alarma se activa en tu cerebro - no porfavor, mas no...- vuelves a car rendida otra vez aturdida e idiota pierdes la nocion hasta de quien eres, despiertas de nuevo en tu habitación, comoda, con paredes verde manzana y muebles blancos... estancia 401 la habia llamado la amable recepcionista mientras atendia una llamada desde su pinganillo; ya habia pasado todo, o eso pensaba..

Fatal idea la que tube, levante la sabana mire mi pierna, o lo que quedaba de ella. Senti como todo mi cuerpo se paralizada y salia repentinamente del aturdimiento, se habia pasado el efecto de lso sedantes, de nuevo lagrimas como borbotones surgieron de mis ojos azules enrojecidos del dolor, todo eran bendas rojas, llenas de sangre y un dolor intenso con cada movimiento. En mi mano izquierda seguia inyencatda aquella aguja, aquella jodida aguja que no conseguia apartarme del dolor que sentia no solo fisico sino interior, mucho mas desgarrador y duro que cualquier ligamento roto..

Derrepente una serie de ruidos se suceden, una conversacion nerviosa entre dos mujeres que se acercan, se detienen en la puerta, -oh no! es mama..- me seco las lagrimas aguanto, mama entra me mira y sonrie pero se da cuenta de que algo no va bien llama al medico, pero eran ya las 3:30, el doctor se habia ido ya a casa...